domingo, 4 de julio de 2010

Con respecto a la opinión sobre que Stonhenge era un "observatorio" donde se plantea que el sol en el solsticio de invierno salía por una lado y en el solsticio de verano salía por otro enmarcados por los bordes de determinados megalitos. de esta manera los torpes humanos, que dicen hicieron esa construcción extraordinaria sabían que tenían que salir a efectuar el sembrado de una determinado grano porque ya había llegado la época de hacerlo. Trabaje 33 años en el Observatorio Geofísico de Pilar, provincia de Córdoba (Argentina) y cuando ingresábamos al trabajo, después de "firmar el reloj" íbamos a la cocina donde el mate nos esperaba a los compañeros del turno mañana. Eramos testigos oculares de los hermosos amaneceres de todos los días del año. Resulta ser que desde ese lugar, podíamos ver el sol asomar por el horizonte el 21 de junio y también el 21 de diciembre. El Observatorio tiene diseminado por el campo (unas 78 hectáreas, si mal no recuerdo) varias casillas, que responden a diversas disciplinas de la Geofísica y Meteorología. Una de ellas, la de Electricidad Atmosférica, orientada como todas las casillas según el polo norte magnético, permita ver salir el sol, exactamente enrasado con el plano de la cara sur de la mencionada construcción, el 21 de junio y la casilla de Magnetismo Terrestre La Cour, el 21 de diciembre enrasaba el sol desde su nacimiento por su cara Sur. Nadie construyó las casillas con el objeto que determinen los solsticios, es una casualidad. No va ocurrir como con las construcciones de piedras que duran miles de años pero si así fuera no faltaría que diría que ambas casillas serbían para la determinación de los solsticios y en lo único que tendrían razón, es que si era un Observatorio.
La manía de atribuirle a las ruinas utilidades cientìficas para determinar los solsticios para que los humanos sepan cuando tienen que sembrar me parece altamente estúpido, como dijo Jesucristo: "De la higuera aprended la paràbola: cuando ya su rama està tierna, y brotan las hojas, sabèis que el verano se acerca", Mateo 24-32. En la naturaleza està la respuesta. No conozco a ningún campesino que tenga alguna construcción que sirva a esos propósitos, se guían por lo que la naturalezas les enseño con los años y siembran cuando corresponde. Ahora, se imaginan semejante construcción, con los sacrificios humanos que deben haber costado (si fueron los humanos los que la hicieron) para constatar cuando se tenía que empezar a cosechar, cuando en la naruraleza hay cientos de indicios para saberlo, incluyendo que podían plantar un simple troco de árbol el día del equinoccio y ya era suficiente o simplemente tomar un objeto de la naturaleza, una roca, un árbol, etc con ese fin. Nunca tuve conocimiento que en el Observatorio de Pilar fuera algún campesino a consultar el Almanaque Náutico, para saber el día del equinoccio, que es donde figuran el movimiento de los astros con su nacimiento, recorrido y puesta, en grados, minutos y segundos.
Pero estas ruinas no son las únicas a las que se las tacha de observatorio astronómico, son muchas, entre ellas las del Observatorio de Chichen Itza, en la peninsula de Yucatán.

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