sábado, 18 de diciembre de 2010

LA CONFUSION III - ENCUENTROS

En período de los Grandes Imperios los dioses interactuaban con los hombres, estaban en discordia entre ellos y se pelaban a muerte. Los humanos eran testigos de esas luchas y poco a poco fueron haciendo partidos con los dioses y estos les daban lugar para pelear por territorios. Para ello les proporcionaban armas muy poderosas cuyos efectos se describen en la respectiva literaturas, como el Mahabaratha, Ramayana incluyendo la Biblia. Esas armas actuaban según las necesidades aveces encandilaban al enemigo cegándolo durante un lapso de tiempo, en otras ocasiones provocaban somnolencia o parálisis y las más frecuentes las de matanzas masivas. Los dioses, extraterrestres, no estaban entre los humanos, conocían el poder de ellos y no querían arriesgar el pellejo. Se mantenían aislados, ocultos con sus familias y resguardados por dispositivos de protección, unos especies de robots o androides que construía ENKI. Pero entonces tuvieron que establecer un gobierno humano, pusieron un rey de confianza, que respondía a sus mandatos. Otros sin ser reyes, gozaban de privilegios extraordinarios ante los extraterrestres, eso si, cuando les dejaban de hacer falta, o les fallaban en su confianza a degüello y a otra cosa. Esta parte de la historia, para mi, es muy desagradable, porque los humanos peleaban por sus dioses y cuando veían que las cosas estaban fáciles, por ahí tomaban algunas decisiones personales que no le agradaban a la deidad y casi siempre terminaban en un reguero de sangre. Los humanos se acostumbraron a pelear y conquistar, haciendo del asesinato un oficio y en la época de los Asirios, las matanzas eran tan crueles que hasta los dioses se artaron y se fueron, a donde, no se sabe, pero debe ser por acá cerca.Los sacerdotes que antiguamente eran el brazo derecho de la deidad, solo se comunicaban por artefactos, estatuas parlantes que si, tenían dispositivos para escuchar su vos. Cuando los dioses no escuchaban sus peticiones, porque no estaban, o andaban por el baño o paseando por la azotea, hacían una conversación con la piedra, imploración, hasta que por ahí aparecía el dios, quien escuchaba sus reclamos o los reclamos del rey. Bien, será concedido pero debes hacer el sacrificio de un animalito, que este sano, y los ofrendará en este altar. Mas o menos así, el antiguo asado que tanto le gustaba a los dioses se transformó en un sacrificio de animales, según el escaso concepto que el 10% del cerebro le permitía interpretar. Cuando los dioses se retiraron, los sacerdotes quedaron al descubierto, no se comunicaban con los dioses, hacían los sacrificios y se los comían ellos. Por más sacrificios que hacían no había respuesta de esta manera, los sacerdotes comenzaron a sacrificar humanos para llamar la atención de los dioses y solo lograban el silencio. Debían hacer algo importante y temible, que cause pánico, de esa manera podían conseguir obediencia y el respeto de la pobre gente.
Abram, profeta de Jahvéh, o si se quiere sacerdote, era hijo de Teraj, sacerdote de Nippur (Nibri-ki Acadio) donde nació Abram . Por orden de Jehová cargó sus pertenencias y se fue para Erek,la ciudad de Uruk(Ur biblico) donde vivía Nannar Hijo de Enlil, Annunaki nacido en la Tierra. Abram conocía a la deidad, Jahvéh, sabía lo terrible que era cuando se enojaba y le servía dócilmente, recuerden que estuvo a punto de matar a su hijo porque Jehová le pidió que lo sacrificara, fue detenido en el preciso momento en que iba a asestar el golpe mortala Isaac. Ahí va el relato del encuentro de Abram. Génesis 18:1
Después le apareció Jehova en el encinar de Mamré, estando el sentado en la puerta de su tienda en el calor del día. 2- Alzó sus ojos y miró, y he aquí tres varones, que estaban junto a él, y cuando los vió, salió corriendo a la puerta de su tienda a recibirlos y se postró en tierra. 3- dijo: Señor si ahora he hayado gracias en tus ojos , te ruego que no pases de tu siervo. 4- Que traiga ahora un poco de agua, y lavaos vuestros pies y recostaos debajo de un árbol. 5- Traeré un bocado de pan y sustentad vuestro corazón, y despues pasareís: pues por eso habeis pasado cerca de vuestro siervo. Y ellos dijeron: Haz así como has dicho.
Bueno, al que le interese tendría que leer todo el capítulo porque es muy esclarecedor. Abram penetra en la tienda y le dice a su mujer , Sara que prepare unos panes sin levaduras y fue al redil a buscar un becerro tierno para el asadito debajo de un arbol, a las 11 de la mañana más o menos. Abram reconoció a uno de ellos como Jehvéh y se quedaron conversandohasta pasada la tarde. Cuando se estabn por ir hablaron entre ellos la posibilidad de contarle a Abram lo que estaban por hacer. El asunto era que al día siguiente le iban a meter "bomba" a Sodoma y Gomorra pero tanían que sacar al pariente de Abram, Lot que vivía en Sodoma. Para ello se fueron los acompañantes de la deidad hacia Sodoma, llegando al anochecer. Pasarona la casa de Lot y una multitud quería aprenderlos (no se para qué ni porqué, dicen los eruditos que querían sodomisarlos) pero los emisarios, ángeles, enviados o extratrrestres salieron a la puerta y levantando la mano encandilaron a la multitud. La historia es linda, leanla. Al día siguiente, temprano, salieron con la familia sobre la hora y les dijeron que no miren atrás porque se convertirían en estatuas de sal y así fue como la mujer de Lot se dió vuelta y se transformó. La historia del encuentro continua. Abram, después Abraham, tuvo que meterse en una guerra con los dioses y humanos de la que salió vencedor. Parece que tenía una división de camellos con guerreros annunakis, ya que su ejercito era de unos 300 hombres y lucho con cinco reyes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario